VACUNAS PARA EL VIH

Según datos de ONUSIDA se estima  que a finales de 2019, había 38 millones de personas con el VIH (virus de inmunodeficiencia adquirida) en el mundo y que existen aproximadamente  2,6 millones de nuevas infecciones por año.

En Uruguay se presume que existen 15000 personas con VIH, y de ellas 11.400 con diagnóstico confirmado (alrededor de 80% conoce su estado serológico).  Tres de cada 5 están en tratamiento antirretroviral (TAR), y 50 % de los que reciben el TAR tienen carga viral indetectable que es el objetivo del tratamiento.

 El cumplimiento del tratamiento Antirretroviral (TAR), logra hacer  la  carga viral  indetectable y aumentar la cifra de CD4. Lo que lleva a una mejoría en la supervivencia de los individuos.

En los países ricos la enfermedad tiene actualmente una  evolución crónica. Esto ha llevado a que aumente la importancia  de los factores ligados al envejecimiento de los individuos  y sus hábitos de vida (tabaquismo, obesidad, sedentarismo), generándose nuevos problemas de comorbilidades asociadas a la infección por el VIH (riesgo cardiovascular; diabetes; neoplasias no ligadas al sida).

Las opciones de tratamiento siguen siendo muy limitadas en los países pobres,, y se siguen usando fármacos prácticamente abandonados en el primer mundo por su toxicidad sus efectos secundarios.

El 14 de junio de 2021  acaba de concluir la Reunión de Alto Nivel sobre el Sida de la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York (Estados Unidos de América). Los Estados miembros de las Naciones Unidas han adoptado una nueva Declaración política sobre el VIH y el sida muy ambiciosa y alcanzable: Acabar con las desigualdades y estar en condiciones de poner fin al SIDA para 2030.

La primera vacuna frente al VIH se intentó diseñar a mediados de la década de los 80. En aquel momento, la tarea parecía relativamente sencilla, y se planteó desde un abordaje clásico utilizado con éxito para la creación de vacunas frente a otros microorganismos, la inyección de proteínas de la cubierta viral para la generación de una respuesta de anticuerpos potente y duradera.

Se conocen muchos ensayos que fracasaron con este planteo.

En la actualidad se considera que la obtención de una vacuna eficaz frente al VIH-1 es un objetivo alcanzable, y hay un gran número de grupos trabajando en proyectos ambiciosos en este campo.

Existen múltiples  desafíos para el desarrollo de una vacuna contra el VIH

  1. La gran diversidad del virus
  2. capacidad del virus para evadir las respuestas adaptativas inmunes
  3. incapacidad para inducir una respuesta de anticuerpos de amplio espectro
  4. establecimiento precoz de los reservorios virales latentes
  5. falta de una clara correlación inmune con la protección

El VIH- 1  tiene una inmensa diversidad genética de cepas circulantes (cuasiespecies),  esto es debido a la alta tasa de errores de la transcriptasa inversa viral y al gran número de ciclos de replicación viral, lo que implica una constante evolución del VIH-1. Se calcula que el VIH tiene mil veces más variantes que el coronavirus.

En este momento existen en marcha numerosas investigaciones en busca de vacunas para el VIH. Existen diferentes estrategias para la búsqueda de una vacuna:

  • inducir respuestas especificas a las variedades regionales del VIH-1
  • inducir anticuerpos ampliamente neutralizantes
  • inducir respuestas celulares a regiones del virus muy conservadas
  • inducir respuestas celulares a regiones del virus muy diversas

Existen 2 tipos fundamentales de vacunas: las preventivas que previenen la adquisición de la enfermedad y las terapéuticas que buscan la erradicación de la infección o la curación funcional (entendiéndose como curación funcional el control virológico en ausencia de TAR).

También existen las estrategias de curación combinada utilizando vacunas terapéuticas y fármacos.

Existen numerosas investigaciones en marcha sobre vacunas para el VIH-1 en este momento. Pasamos a comentar algunos estudios:

MOSAICO- vacuna preventiva

Es un estudio en fase 3 que busca la eficacia en el mundo real. Ya supero los estudios de seguridad y se comprobó que genera anticuerpos en condiciones ideales.

La vacuna consta de un Adenovirus modificado que porta las proteínas inmunógenas para hacer que el sistema inmunitario genere anticuerpos específicos.

En este estudio se ensayan 2 vacunas una codificada con 3 y otra con 4 proteínas.

La duración del mismo es entre 24 y 36 meses para verificar permanencia e intensidad de la protección.

Para el mismo se reclutaron 3800 personas,  HSH y personas transexuales,  entre los 18 y 60 años de edad, que no usaran Prep. Participan en el mismo diferentes  países como España, Polonia, Italia, EEUU, México, Brasil y Argentina.

Ensayo IAVI G001 – vacuna preventiva

Es un ensayo en fase 1 en humanos, que utiliza la tecnología plataforma ARNm. (La misma plataforma que para algunas vacunas contra COVID19)

El enfoque es dirigir la vacuna para estimular determinadas células inmunes fundamentalmente linfocitos B y generar Anticuerpos ampliamente neutralizantes.

La misma estrategia podría utilizarse para otras enfermedades como Dengue, Zika, Malaria.

Es un ensayo con un número de pacientes pequeño (48 pacientes) donde se logró una tasa de respuesta del 97% para producir anticuerpos neutralizantes.

El Dr. Peng Zhang del instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de EEUU en colaboración con el laboratorio Moderna  planteo en el CROI 20121 un ensayo realizado en monos con una vacuna de ARNm que protege a los monos de un virus similar al VIH (VIS).

En el estudio 7 monos recibieron la vacuna y 7 placebos. Fueron expuestos al virus VIS cada semana por 13 semanas. Los 7 monos del grupo placebo se infectaron alrededor del mes y medio y los 7 vacunados permanecieron libres de la infección a los 2 meses.

AELIX 002// vacuna HTI. Vacuna terapéutica

También en el CROI de este año se mostró un ensayo con una vacuna terapéutica, mostrando el potencial para controlar el VIH sin el TAR.

Este ensayo se realiza con el Instituto de investigación del SIDA  Irsi.Caixa de Badalona – España.

Se basó en personas ¨controladoras de elite¨ (individuos que controlan la replicación viral sin TAR), la vacuna se diseñó para estimular respuestas similares en las personas inoculadas.

Es un estudio en fase 1/2ª en sujetos recién infectados con carga viral indetectable y CD4 mayores a 400 cél/ml.

El numero de individuos fue de 45 sujetos. El 40% de los participantes que han recibido la vacuna controlan mejor el virus cuando se retira el TAR, se han mantenido sin tratamiento durante 6 meses.

Se plantean estrategias de curación funcional combinada: fármacos y vacunas terapéuticas.

Sin duda queda mucho por investigar, pero existe en este momento mucha expectativa con el desarrollo de una vacuna para el VIH-1.